viernes, 10 de junio de 2011

EL DELITO DE AMAMANTAR A UN HIJO.

EL DELITO DE AMAMANTAR A UN HIJO.


“La lactancia materna es el regalo más precioso
                 que una madre puede dar a su bebé”

                    La Comunidad de Madrid y sus instituciones funcionan como funcionan y a menudo nos INDIGNAN  con sus modos de gobierno.  Pero lo que en este momento está ocurriendo con Habiba y su niña, bebé de 15 meses, es algo que si no lo estuviéramos viviendo muchos no podríamos creer.

           Que las dictaduras roban niños a sus madres con diversos fines, es algo sabido y aceptado en la historia de todos los países, pero estamos comprobando que en las democracias también….
       Y si no es así… ¿cómo explicar lo que está ocurriendo en este caso, cuando un organismo como el IMMF, el instituto madrileño del menor y la familia , que según se ´define a sí mismo, se encarga de coordinar una serie de actuaciones que inciden en el bienestar social de los niños, así como promocionar políticas de protección a las familias, toma decisiones de este tipo?
La leche materna es el alimento más nutritivo que hay, y lo repiten en ese documento, prologado por  el Consejero Sr. Lamela Fernandez, Consejero de Sanidad y Consumo, ya muy famoso por varios desmanes en materia de salud,  y que lleva el título de:
                   " Amamantar: Una elección, un deseo." 
  
                     Y si queda probado y reconocido que esto es así, ¿a qué viene que se separe de esta forma tan radical y tan desproporcionada a Habiba de su pequeña?
Argumentan que la niña ya es demasiado mayor……
Pero La Organización Mundial de la Salud recomienda la lactancia materna, aún cuando ya se alterne con otros alimentos, y dice que el tiempo límite para seguir dando el pecho lo pone la madre y el bebé. Incluso la recomienda hasta los dos años.
                      Y esto también  lo recogen en el citado documento.
                     Si a una mujer le ofrecen un remedio que garantiza el mejor desarrollo físico y psíquico de su bebé, lo protege de infecciones y de enfermedades futuras y la protege a ella misma, ¿quién se negaría a aceptarlo teniendo en cuenta que es gratis y está al alcance de todas?

        Siempre el acto de amamantar es un acto de amor. El dar de mamar en un lugar público es algo que no viola ninguna ley y es aceptado socialmente. Hasta que ha llegado el IMMF y nos dice lo contrario, empeñados en contradecir a médicos y expertos de todo el mundo. Y añade, como justificación a esta medida,  que considera como "habilidad maternal" dejar la lactancia prolongada por considerarla "caótica y perjudicial", en contra de lo que dice la Asociación Española de Pediatría.  
  
             Muchos tuvimos la suerte de que nuestras madres nos dieron de mamar el tiempo que fue necesario. Quizás  a Dª Paloma Martín Martín, la directora-gerente del Instituto Madrileño del Menor y la Familia (IMMF),  NO  la amamantaron amorosamente, y se le nota.

viernes, 3 de junio de 2011

LA REINA DE LA NIEVES

             "En aquel tiempo había en el mundo un espejo mágico y al mirar dentro de él,  se veían solo las cosas malas, las desagradables; se olvidaban las buenas. A su dueño, el mismísimo diablo,  se le resbaló rompiéndose en mil pedazos pequeños que volaron por toda la tierra  y a algunas personas se les clavó uno de aquellos fragmentos, bien en el ojo, bien en el corazón. También en el corazón de nuestro protagonista se coló uno como un grano de arena y desde entonces,  comenzó a enfriarse convirtiéndose en un trozo de hielo”.
                                                                       ( La Reina de las Nieves).



          ... Y ya no te resistes a escuchar  los cantos de sirena que te reclaman y llevan al camino oscuro dentro de un  territorio que conoces palmo a palmo,  pero en el que pierdes la memoria y la lucidez.

      
           Dime que fue lo que enturbió tus ganas de seguir, llevándose la risa y el valor con el que te veíamos.  Qué  ha sido lo que ha puesto tu mundo del revés para que estés así fumándote los días  ahogados en alcohol, en nieve y fuego de espinas de cristal, acelerando un corazón ya fuera de control.   
    
                Por qué cuando creemos que estás a punto de salir, es cuando en realidad estás entrando en el vacío y el vértigo del tiempo sin sentido.


                 Y  has vuelto a recoger cucharas impregnadas de heroína,  y el polvo de la nieve cegadora surcando rayas que dilatan tu mirada y te hace sentir frío  en cada amanecer, 
y buscas incansable un trago más,   y alcanzas sobredosis de castigo.
  
               Dime por qué mi idea de la libertad, 
a ti te da tanto pavor, te atenaza y te paraliza.   
Por qué cuando parece que puedes manejar tu propia vida y decidir que hacer, a donde ir, es cuando todo se convierte en un laberinto sin sentido y solo vives dándote contra la esquinas de todo  lo que te rodea.
   
               Por qué mi cielo azul, mi mar, mi campo, mi ciudad, mi gente, y mi mano tendida hacia la tuya, no significan ahora nada para ti, no abren tus ventanas, no te atraen a la mesa  del salón, no calientan tu cama, y sales a dormir entre el cartón bajo la noche fría y solitaria.
 
               Dime por qué el aire que respiro alrededor, a ti no te hace respirar, y es más bien una reja invisible que te atrapa, que pone entre nosotras un cristal, ese cristal agujereado  y separador, que llevas como equipaje eternamente.

              Me cuesta verte como en aquella canción, recorriendo las calles  " ajustando el paso a los demás, intentando cualquier cosa por dinero...."   Dime por qué no encuentro algún recurso que aplicar , qué cosas quedan aún por hacer para arropar tu soledad,  para poder volver a establecer alguna comunicación que a mi me permite entender, y a ti quizás te sirva para alzar el pie un poquito más hacia algún escalón que te eleve de nuevo.
      
                Dime por qué  esta noche vuelvo a recordar los años que he pasado  en el afán de tender la mano hacia otros que, como ahora tú, querían escapar de no se cuanto dolor y cuanta frustración, y que con el miedo en la mirada y el desvarío de sus delirios, siempre recogían esa mano para apretarla, hasta que partieron por la escalera al cielo.

                Y  dime a ver si mañana, o pasado, o al otro, 
                                                me puedes explicar  por qué no se leerte….