"Aquí pensaban seguir, jugando a la democracia y el pueblo, que en su desgracia,
se acabara de morir.
Y seguir de modo cruel, sin cuidarse ni la forma, con el robo como norma... y en eso llegó ....... (Carlos Puebla)*
España
es uno de los pueblos del Sur que forma parte de ese experimento que se está llevando a cabo, digamos financieramente, y que nos deja en la situación que vivimos en
la actualidad, donde el bipartidismo se ha convertido en una institución a la
que de una forma o de otra hemos caído rendidos, perdiendo en ese camino de
modo de gobierno la forma de organización social que atribuye la
titularidad del poder al conjunto de la sociedad.
Tras las elecciones
municipales y autonómicas del 24 de mayo pasado, en algunos lugares se ha
encendido una lamparita de esperanza porque han llegado, hemos elegido, a
personas de distintos lugares de pertenencia pero fuera de los partidos
políticos a la usanza.
Podríamos
decir, como en la canción de Carlos Puebla, que
“Se
acabó la diversión, llegó… (el pueblo llano) y mandó a parar".
Cada uno, en esos puntos
suspensivos, puede leer aquel grupo o colectivo que les haga de nuevo mantener
la ilusión y la esperanza en un porvenir más justo y más solidario, en una
participación activa y plena que no nos cierre las puertas de la vida, que no anteponga
la rentabilidad económica al servicio público, al bien común.
A aquellos que
terminen con la complicidad hipócrita de tanto político y tanto ciudadano
conforme con este sistema porque se ha convertido en un burgués de izquierdas,
que es el pilar que sujeta todo el engranaje en espera de su cuota de poder.
A los que creen en una
forma de organización social que atribuya la titularidad del poder al conjunto
de la sociedad.
A los que castiguen el fraude y pongan
fin a los paraísos fiscales, que compartan la dramática situación que
vivimos y sientan que esto sólo se arregla entre todos y con el protagonismo
popular y ciudadano; que quieran superar el régimen caduco y cambiar esta
Europa que hoy está al servicio de una minoría privilegiada.
A aquellos que devuelvan a
la actividad del trabajo la dignidad y el salario necesarios para dejar atrás
la esclavitud que han impuesto con las sucesivas reformas laborales
bipartidistas.
A quienes piensan que no
sobra nadie y que han de estar los que estén por la
democracia, los derechos humanos y una vida digna para todos, sean de donde
sean.
Aquellos
que eliminen los Centros de Internamiento de Extranjeros y prohíban la
llamada "directiva de la vergüenza". Que acaben con los programas
FRONTEX y EUROSUR y con las vallas fronterizas "antipersona" en Ceuta
y Melilla.
En definitiva, pongamos
en esos puntos suspensivos a aquellos que nos ayuden a
empoderarnos y participar de la construcción de una sociedad distinta a
la que nos han traído a pesar de nuestra lucha o con nuestra cómoda
complicidad.
Y si nos defraudan, les mandaremos parar….
*Carlos Puebla fue
un compositor
y guitarrista que cultivó los más diversos géneros de la música popular cubana,
uniendo a sus facultades de músico, las de poeta. Puebla cantó los hechos más
relevantes de la historia del pueblo cubano, convirtiéndose en el cronista por
excelencia de todo el acontecer nacional desde 1959. Es autor de célebres
canciones, que muchos aún escuchamos con emoción.
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